Por: Dr. Mike Campbell
La economía japonesa creció más despacio en el cuarto trimestre de 2014 de lo que se creyó inicialmente. Las primeras lecturas arrojaron un crecimiento del 2.2%; sin embargo, la cifra se ha revisado a la baja hacia el 1.5% una vez que se dispuso de mayor información. Los niveles de los inventarios y de la inversión de capital fueron menores que lo anticipado, reforzando la revisión negativa.
En el lado positivo del balance, las últimas cifras del cuarto trimestre indicaron que el gasto del consumidor fue más fuerte de lo esperado, lo que podría indicar que las medidas destinadas a cambiar los hábitos de consumo, principalmente el aumento del impuesto a las ventas en abril (al 8%), finalmente están trabajando en el camino correcto. El consumo privado que representa alrededor del 60% de la producción económica japonesa, subió un 0,5% en el trimestre, más fuerte que la estimación inicial del 0,3%.
El cuarto trimestre mostró un incremento del 0,4% del PIB en comparación con el tercero - la economía japonesa entró en recesión en T2 y T3 en gran parte como consecuencia del incremento en el impuesto de ventas-, con contracciones trimestrales de 1,9 y 0,6%, respectivamente. La cifra de crecimiento de T4 lleva a la recesión a su fin, pero la demanda interna sigue siendo débil.
La economía japonesa es la tercera más grande del mundo y tiene la mayor industria electrónica mundial, así como tercera industria de fabricación de automóviles, pero ambos sectores se han visto afectados por la debilidad de la demanda global (y hasta el verano) un yen fuerte.
El yen se ha apreciado fuertemente frente al euro, pasando de un nivel bajo de 149,03 yenes por euro el 05 de diciembre 2014 a un máximo de 128,29 el 12 de marzo de 2015, colocándolo muy por debajo de la media de los últimos 12 meses de 1 € = 139,21 yenes. Por el contrario, en el último año, ha caído de 101 yenes por dólar en marzo pasado, hasta situarse en aproximadamente 121,4 en la actualidad.
China y Estados Unidos son los principales socios comerciales de Japón, lo que es una buena noticia dada la situación monetaria. El yuan sigue al dólar muy de cerca, por lo que el costo de las exportaciones japonesas (en yenes) a China y los EE.UU. ha caído sustancialmente en los últimos 12 meses, ya que el dólar se ha fortalecido. (En comparación, el euro ha caído de $ 1.395 (mayo), hasta situarse en alrededor de $ 1.057 en la actualidad).