El intento de golpe contra el gobierno del Presidente Erdogan por un grupo de oficiales del ejército en Turquía convirtió una breve sensación de optimismo en los mercados mundiales en un abruptamente desconcertante viernes. Una semana en la que el índice S & P 500 alcanzó máximos históricos después de un paréntesis de 13 meses y durante la cual los mercados de valores subieron a un máximo de ocho meses se vino abajo al final del día de negociación.
Rallies en Tokio y Nueva York estaban empezando a despegar cuando los militares arremetieron contra el gobierno tratando de tomar el poder en Ankara, empujando a la baja los mercados de valores y enviando la lira turca a su peor caída en ocho años
Los acontecimientos geopolíticos de las últimas semanas han causado caos en los mercados globales, tanto en inversionistas como en gestores de fondos, haciendo que salgan a la búsqueda de lugares seguros para colocar su dinero -al menos en el corto plazo-, con la esperanza de que las cosas se calmen pronto.
Terrorismo en París, Bruselas y Niza, así como el voto de Gran Bretaña a favor de separarse de la Unión Europea han causado un impacto global que ha mantenido a los inversionistas bajo una tremenda presión en este último año, y el intento de golpe en Turquía no ha ayudado a que la sensación de tranquilidad regrese en la esperanza de que las cosas van cambiar rápidamente.
El impacto en los mercados de Estados Unidos es incierto. El ratio precio-ganancias del S & P 500 subió por encima del 20 por ciento la semana pasada por primera vez en siete años, ayudado por el dinero proveniente de los bonos del gobierno donde los rendimientos oscilan en mínimos no vistos. Los acontecimientos en Turquía pueden llegar a ser una excusa para que los inversores se sigan absteniendo de saltar a los mercados.
Economía de Turquía Expuesta
La economía de Turquía se ha vuelto cada vez más vulnerables desde octubre de 2015, cuando dos bombas fueron detonadas fuera de la estación central de trenes de Ankara matando a 103 civiles. Este atentado fue seguido por otro en marzo, cuando terrorista saudí de 28 años detonó un artefacto explosivo dentro de una multitud de turistas alemanes matando a 10 personas e hiriendo a 15 y luego por otro en abril, cuando un atacante suicida se inmoló frente a una mezquita histórica en Turquía, hiriendo al menos a 13 personas. Apenas el mes pasado, al menos 11 personas murieron en un ataque con coche bomba en el centro de Estambul.
El turismo en Turquía y la inversión extranjera se han reducido enormemente y, según los economistas, el déficit se ampliaría al 4,5 por ciento del producto interno bruto este año, desde el 4,4 por ciento en 2015.
Turquía y los Mercados Emergentes
Los mercados emergentes han tenido un buen desempeño en los últimos tiempos. El Índice MSCI Emerging Markets ha avanzado un 9,3 por ciento este año, como resultado de una recuperación de las materias primas y la posibilidad de continuar los estímulos del banco mundial.
De acuerdo con Paul Christopher, el estratega de mercados globales del Instituto de Inversión Fargo, que supervisa $ 1.6 billones de dólares, el último evento en Turquía podría hacer que los inversores se empiecen a cuestionar el rally de los mercados emergentes y que empiecen a mirar "más cuidadosamente los fundamentos."
Un estratega de una importante consultora de mercados emergentes con sede en Londres advirtió a sus clientes que la situación actual en Turquía puede "actuar como un catalizador para la siguiente etapa en los mercados emergentes, ya que afecta a toda la categoría”.