El dólar estadounidense registró el peor mes de enero en 30 años, terminando el último día del mes reforzando su debilidad tras las declaraciones de la administración Trump de que Japón y Alemania han estado devaluando sus monedas para crear una ventaja comercial sobre Estados Unidos. Concretamente, el principal asesor comercial de Trump, Peter Navarro, dijo que Alemania estaba usando un euro “infravalorado” para aprovecharse de sus socios comerciales. Trump mostró sentimientos similares diciendo: “Todos los demás países viven de la devaluación. Mire lo que está haciendo China, mire lo que ha hecho Japón a lo largo de los años. Ellos juegan al mercado monetario, juegan al mercado de la devaluación y nos sentamos allí como un puñado de maniquíes”.
Las esperanzas de los inversores sobre el plan de estímulo fiscal de Trump han sido puestas en tela de juicio tras la prohibición del nuevo presidente de la inmigración procedente de siete países de la lista negra que se implementó el fin de semana pasado por orden ejecutiva. La Reserva Federal, que concluye hoy su reunión de política de dos días, mantendrá los tipos de interés sin cambios mientras espera saber más sobre la implementación de la política económica de Donald Trump. Aún se esperan varias subidas de tipos de interés a finales de este año. El S&P 500 cayó el martes por cuarta sesión consecutiva, aunque cerró enero en verde.
El dólar borró parte de las pérdidas del martes durante la sesión asiática del miércoles, cotizando a 112,94 yenes, aún muy por debajo del máximo del lunes de 115,01. El euro cedió un 0,1% para cotizar a 1,0791 dólares tras alcanzar un máximo de 7 semanas el martes. El índice del dólar cayó casi un 1% durante la noche hasta cerca de los mínimos de diciembre, pero subió un 0,2% el miércoles, cotizando a 99705 .DXY.