Buenos datos económicos globales siguen impulsado las bolsas en todo el mundo, que en la pasada semana marcaron nuevos máximos en 18 meses. Sin embargo, siguen existiendo temores en torno a la forma que tome la recuperación. Los datos sugieren que estamos en una nueva fase de la recuperación donde muchos índices industriales han pegado un salto, quebrando los máximos anteriores.
Esto no implica que a futuro esto deba de continuar así, las dudas aún persisten y es posible una recaiga. ¿Será capaz el sector privado de tomar el lugar que vaya quedando a medida que se retiren los estímulos? El inicio del ciclo alcista de las tasas de referencia, como es lógico va rezagado a lo que es el ciclo económico y aún está lejos, aunque falta menos que antes para que comience.
Mientras tanto, las tasas de interés de los títulos de deuda siguen subiendo impulsando a las tasas de interés al alza. Esto puede llegar a generar dolores de cabeza a varios gobiernos, que aún siguen con importantes necesidades de financiamiento. La caída en el precio de los títulos, se puede tornar altamente problemática, si al mayor optimismo por una recuperación, el mercado comienza a preocuparse del alto nivel de endeudamiento de muchos países y comienza a disminuir la demanda por títulos de deuda. Es decir, que además del cambio de cartera a activos más riesgosos por optimismo, le puede seguir una huida de los títulos por preocupaciones en torno al estado de las cuentas fiscales.
Como viene sucediendo desde hace tiempo, si bien los datos económicos siguen señalando una recuperación, siempre quedan algunos que generan dudas y tras lo vivido en la crisis, estos siguen siendo señales de alerta y no simples números. El informe Tankan en Japón fue positivo, pero no completo; en lo que respecta a expectativas no fue del todo bueno. En Estados Unidos, el mal dato de empleo de ADP fue opacado por las nóminas no agrícolas; el precio de las viviendas sigue dando señales de estabilización, pero no de recuperación, y con la suba de tasas de interés en puerta (incluidas las hipotecarias) la situación se puede complicar.
En el Forex, las monedas ligadas a commodities tuvieron un buen desempeño, siendo la mejor el dólar australiano. La libra también subió y se alejó de los mínimos marcados en marzo (aunque aún se mantiene cerca).
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