China y la Manipulación de Divisas

El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos hace dos evaluaciones anuales del valor relativo de la moneda china, el yuan, frente al dólar americano. Estados Unidos ha sugerido durante mucho tiempo que los chinos manipulan el valor de su moneda con el fin de dar una ventaja a sus exportaciones en el comercio bilateral con los Estados Unidos y otras naciones que realizan transacciones utilizando la moneda de USA. China, habitualmente, afirma que este no es el caso.

El informe más reciente del Tesoro no dice abiertamente que las autoridades chinas son manipuladoras de divisas, pero afirman que el yuan sigue estando "significativamente infravalorado" e instó a China a avanzar más en permitir que el yuan se aprecie frente al dólar y otras las principales monedas internacionales. El informe señala que: "Las autoridades chinas han reducido sustancialmente el nivel de intervención oficial en los mercados de cambio desde el tercer trimestre de 2011, y China ha tomado una serie de medidas para liberalizar los controles sobre los movimientos de capital, como parte de un plan más amplio para moverse hacia un régimen de tipo de cambio más flexible".

En 2005, China se embarcó en una política de gestión de divisas a través de la cual el yuan se fija contra una canasta de monedas extranjeras - por lo que difícilmente se podría decir que su valor es fijado por las fuerzas del mercado: está claro que es "manejado" por el estado - manipulado es una palabra fea. Esta estrategia ha visto a la moneda apreciarse en un 9,3% frente al dólar pero, en el mismo período, el yen se ha apreciado en un 11,3%. Dado que el rendimiento de la economía china en este periodo en términos de crecimiento del PBI ha sido muy superior a los de Japón y Estados Unidos, los factores económicos determinan que el yuan debería haberse fortalecido significativamente contra ambas monedas.

La cuestión de la manipulación de la moneda no es de simple economía ya que, si los Estados Unidos acusaran oficialmente a China de manipular su moneda, la medida podría precipitar sanciones comerciales, lo cual no sería un hecho positivo teniendo en cuenta el estado de debilidad de la demanda global.