La Comisión Europea (CE) ha reducido radicalmente su proyección de crecimiento para el año 2013. Anteriormente, la CE había pronosticado que las economías de la Eurozona crecerían un 1% el próximo año, pero su pronóstico más reciente es que el crecimiento en el bloque de 17 miembros del estado será un anémico 0,1%. Sin embargo, se pronostica que la recesión se puede evitará para la Eurozona. Su proyección actual para 2012 es que la zona sufrirá una contracción del 0,4%, y que la Unión Europea en su totalidad se contraerá un 0,3%.
Añadiendo esto a la expectativas sobre un posible acantilado fiscal en los Estados Unidos, la predicción CE ha ayudado a enviar el euro y a los mercados de valores hacia la baja. El estado de ánimo se debilitó aún más por la publicación de las peores cifras de producción para la industria alemana desde abril. El euro cotiza actualmente a 1,2737 dólares y la libra está comprando 1,2535. Cuando surgió el pronóstico, las bolsas de París y Fráncfort perdieron un 2% y Londres cerró un 1,6% más baja, mientras que el Dow Jones cedió un 2,4% de su valor, perdiendo todas las ganancias obtenidas desde agosto. Los mercados continúan bajando.
Mientras que el número de empleos creados en los USA ha mejorado, en el otro lado del charco el desempleo de la UE ha alcanzado un nuevo máximo. El desempleo de la eurozona se ha elevado hasta el 11,6% y las previsiones de la CE es que va a seguir empeorando, llegando al 12% (un trabajador de cada ocho) el próximo año. La Comisión prevé que la situación de desempleo no se solucionará antes de 2014. La imagen del desempleo es muy desigual en la zona euro con el nivel más bajo de solo un 4,4% en Austria y el más alto de 25,8% (más de un trabajador de cada cuatro) en España. La carga del desempleo tampoco está distribuida uniformemente con la gente joven teniendo grandes dificultades para obtener un empleo en muchas naciones.