La economía australiana es la 12va más grande en el mundo y fue la única economía desarrollada que no entró en recesión durante la crisis financiera mundial. Fue la primera gran economía en elevar las tasas de interés después de que la peor tormenta había terminado y ha utilizado la herramienta para fomentar el crecimiento.
Se estima que Australia sobrepasará el techo de la deuda de A $ 300 billones en diciembre - exactamente el mismo desafío que enfrentó a los legisladores estadounidenses a principios de este mes y llevó al mundo al borde de un abismo financiero. Se espera que los australianos agreguen todo el margen que puedan necesitar, aumentando su autorización para contraer préstamos a A $ 500 billones. “El límite de la deuda se debe establecer con el fin de proporcionar suficiente espacio para asegurar la estabilidad y la seguridad de los mercados financieros sobre la capacidad del gobierno para financiar sus operaciones en el futuro previsible. Nosotros no necesitamos mirar más allá de los recientes acontecimientos en Estados Unidos para darnos cuenta de lo imprescindible que es la confianza”, afirmó Joe Hockey, Jefe del Tesoro de Australia.
Australia cuenta con una calificación crediticia AAA, lo que significa que sus bonos son considerados como los más seguros y, en consecuencia, sus costos de endeudamiento son bajos. Australia se encuentra en una situación comparativamente saludable frente a otras economías importantes con respecto a su deuda pública. Se espera que la deuda pública australiana llegue al 30% del PIB a finales de año. Esto se compara muy favorablemente con la situación en el Reino Unido y EE.UU., donde la deuda se sitúa en el 92 y el 106% del PIB, respectivamente.
Sr. Hockey subrayó que el gobierno australiano de Ton Abbott tiene interés en mantener un estricto control sobre la deuda que, por supuesto, fue el detonante de la crisis de la deuda soberana europea. "No vamos a permitir que Australia llegue a la posición en que Estados Unidos se encuentra, donde hay gran incertidumbre acerca de la capacidad de un país para vivir dentro de sus posibilidades", dijo en una entrevista con la Australian Broadcasting Corporation. El gobierno tendrá seis semanas para conseguir la legislación cuando el Parlamento reanude a finales de este mes. Es poco probable que se enfrente a algún tipo de oposición, ya que la medida está diseñada para aumentar la capacidad de endeudamiento, en lugar de ser un aumento necesario para cumplir con las obligaciones financieras como es el caso de EE.UU.