China acaba de devaluar su moneda, el yuan, en casi un 4% en dos sorprendentes movimientos sucesivos. Esto incluyó la mayor caída diaria del yuan en más de veinte años. Las razones por las que China tomó esta medida son bastante obvias: su economía se enfrenta a una desaceleración seria y, debido a que su economía es tan relacionada con las exportaciones y depende de las condiciones globales, el gobierno declaró una "guerra de divisas" haciendo sus exportaciones relativamente más baratas para los consumidores extranjeros a través de la solución rápida de la devaluación.
Una pregunta más interesante con respuestas menos transparentes es, ¿qué efectos tendrá dicha medida sobre los mercados globales? Los analistas fundamentales están evaluando profundamente las consecuencias de la devaluación del yuan.
Este movimiento está siendo considerado como una señal de que el gobierno chino se está inclinando a permitir que su moneda flote libremente. Un yuan verdaderamente libre agregará un elemento de inestabilidad en los mercados mundiales, lo que significa que los precios de los bienes manufacturados chinos serían propensos a fluctuar en un mayor grado. Esto a su vez podría agregar más inestabilidad a los precios en las economías que tienen una gran exposición a China, especialmente Australia y Nueva Zelanda.
Fuerzas deflacionarias
Muchos analistas consideran que el efecto macro general de la devaluación china proporcionará un impulso a las fuerzas deflacionarias en toda la economía mundial.
¿Qué significaría esto para las divisas y los mercados? El problema de sacar conclusiones de manera precipitada es que la cadena de la causalidad puede llegar a tener efectos que no son fácilmente predecibles. Los temas subyacentes serán una amenaza de deflación, el daño al crecimiento económico, y el miedo a una competencia entre naciones en la devaluación de sus respectivas monedas.
Muchos analistas consideran que el efecto macro general de la devaluación china proporcionará un impulso a las fuerzas deflacionarias en toda la economía mundial.
El Efecto en el Dólar
El primer efecto es hacer que la perspectiva de un alza de tasas de interés en Estados Unidos en septiembre parezca muy poco probable; de hecho, la idea de un alza en las tasas en cualquier momento antes de 2016 ahora parece cada vez más improbable. Esto ha tenido el efecto inmediato de enviar al dólar a una caída de sus máximos recientes y, aunque puede no haber una duradera y fuerte tendencia contra el USD, es probable que la divisa pierda su fuerza relativa. El enfoque del mercado se dirigirá a otro lugar en la búsqueda de una moneda fuerte, habiendo muy pocos candidatos para este rol.
La Libra Esterlina
La libra esterlina es desde hace algún tiempo la segunda divisa más fuerte después del USD, y realmente la única otra moneda principal en la que el mercado esperaba también un alza de tasas de interés. Aunque el Banco de Inglaterra señaló que un alza de tasas no se dará en el corto plazo, esto no quita que estemos a punto de ver un poco de presión alcista especulativa en la libra.
El Euro
La devaluación del yuan será un nuevo y serio dolor de cabeza para el Banco Central Europeo, que probablemente ha estado disfrutando de unas merecidas vacaciones de agosto recuperándose del reciente drama griego. El programa de flexibilización cuantitativa (QE) en Europa fue lanzado con éxito después de una gran caída del euro frente al dólar, cuyo resultado ha sido el surgimiento de algunos brotes verdes en la recuperación económica. El euro ha estado mostrando algo de fuerza recientemente, lo que es natural después de una gran caída cuando se empieza a pensar en recuperación, pero la moneda común se está disparando ahora contra otras monedas, lo que podría poner un poco de presión deflacionaria y de recesión en las economías europeas. El mayor problema del BCE es que se está quedando sin herramientas políticas, pues ya existe un programa de QE y las tasas de interés están prácticamente en cero. Por ahora, una extensión del QE o tasas de interés negativas es poco probable, pero si el par de divisas EUR/USD rompe con fuerza por encima de 1,15 se podrían volver a evaluar estas opciones.
Commodities
Los precios del petróleo y el cobre son propensos a caer en el corto plazo. A pesar de que tienen un precio en dólares, la mayor parte de la demanda proviene de China, que efectivamente comprará más barato en términos del Yuan. Sin embargo, otro argumento podría ser que China en realidad será capaz de pagar cantidades significativamente mayores de petróleo, lo que podría tener el efecto de suspender cualquier nueva caída significativa en el precio.
Dólar Australiano
Si la devaluación china termina aquí podría esperarse que el dólar australiano caiga, pero probablemente no mucho. Sin embargo, el aussie ya está registrando mínimos de 6 años y ha caído en más de un 25% en los últimos 3 años. El RBA anunció recientemente un cambio paulatino en su política extremadamente laxa, pero puede verse obligado a girar de nuevo hacia la otra dirección. En el corto plazo, probablemente el RBA adoptará la estrategia de solo esperar.
Acciones
El actual mercado alcista global en renta variable está muy maduro y cada vez más débil. Ha habido "cruces de la muerte" en varios mercados y el índice S&P 500 está muy cerca de lo mismo. Obviamente habrá diferencias entre los mercados de acciones geográficamente. A pesar de que ahora se espera que no haya subida de tipos en Estados Unidos en un futuro muy cercano, escenario que hubiera podido apuntalar el mercado de renta variable, el temor sobre el aumento de la perspectiva de desaceleración económica probablemente pesará más. Esto hace una corrección fuerte o el fin de los mercados alcistas más probable.