A veces, el progreso económico es el anfitrión de la fortuna de la naturaleza, uno de los ejemplos más claros de este devastador tsunami que golpeó a Japón en marzo de 2011, dejando miles de muertos y daños significativos a la infraestructura de la nación.
Se está culpando a la naturaleza por una fuerte contracción de la economía japonesa en el tercer trimestre de este año. Japón está en el "anillo de fuego", una zona donde chocan las placas tectónicas, provocando terremotos. Japón sufrió un terremoto de magnitud 6,7 a principios de septiembre, que causó la muerte de al menos nueve personas y provocó grandes deslaves en la isla de Hokkaido. A principios del trimestre, Japón se vio gravemente afectado por las graves inundaciones que provocaron que 8 millones de personas se vieran obligadas a evacuar sus hogares y también fue golpeada por un tifón. Si eso no fuera suficiente, Japón sufrió una ola de calor después de la inundación, a la que se atribuyó 80 muertes y se ingresó a 22000 en el hospital con quejas relacionadas con el calor, como la insolación.
A raíz de un trimestre muy afectado por la madre naturaleza, tal vez no sea sorprendente que el PIB del tercer trimestre cayera a una tasa anualizada del 1,2%, volviendo a la contracción después de un cuarto trimestre de respiro en el segundo trimestre que registró un crecimiento del 1,9%. La reversión en el crecimiento entre Q2 y Q3 este año es la disminución más acusada en 3 años.
En el lado positivo, la caída de la producción económica japonesa debería ser un evento único, ya que se debió en gran medida a la naturaleza. Por otro lado, la economía de Japón podría verse afectada por la guerra comercial entre China y Estados Unidos. El país es un importante contribuyente a las cadenas de suministro globales que exportan componentes de automóviles, componentes electrónicos y maquinaria industrial, además de sus propios productos terminados. Ya existe alguna evidencia de una desaceleración del comercio en Asia como consecuencia de la guerra comercial y esto alimentará a la economía japonesa.