La ley de retirada de la unión europea contenía dos elementos: el acuerdo de retirada en si y la declaración política sobre como las relaciones de la Unión europea y el reino unido serán en el futuro. La posición del gobierno, hasta esta semana, es que ambas partes eran indivisibles y que el parlamento tenía que soportar ambos para asegurar un Brexit. Era así en ese momento…
El miércoles, Theresa May condicionalmente resignó como líder de su partido y primer ministro, típico de ella, hay una fecha límite asociada a este ofrecimiento y por consiguiente a la llegada de un nuevo líder que llevará el proceso del Brexit hacia adelante, a pesar de que la cámara de los comunes debe aprobar el acuerdo de retirada. Como los partidos de oposición no tienen la intención de hacerlo, algunos de los simpatizantes de los Torys que favorecen otro referendo y algunos ERGs se han negado a apoyarlo a menos que los aliados del DUP lo hagan (no lo harán), parece poco probable que la ley (o la mitad de esta) pase cuando sea votada hoy. Esto deja a May como una parcialmente resignada y claramente ineficiente primer ministro y líder de partido a medida que el brexit se vuelve confuso y desordenado.
El acuerdo de retirada tuvo que ser separado del acuerdo político para que la legislación pudiese pasar por encima de la prohibición de hacer un “tercer voto significativo” respecto a una legislación inalterada que ha sido descartada por el vocero de la cámara de los comunes. Preguntas han sido hechas sobre la legalidad de la decisión de separarla de la declaración y muchos de sus críticos dicen que aprobarla será equivalente a un “Brexit con los ojos vendados” lo que le podría dar a un posible primer ministro tory demasiado control sobre el proceso. Se piensa que el partido elegirá a un primer ministro a favor del Brexit de el ala derechista del partido cuando el primer ministro May se retire.
En caso de que la ley no sea aprobada, no está claro cuales serán los siguientes pasos a seguir. Una ronda de votaciones indicativas será probablemente realizada el lunes mientras que los parlamentarios tienen problemas para encontrar opciones que sean aceptables para la mayoría de los miembros de el parlamento. Los dos mayores competidores que saldrán derrotados después de la primera ronda serán una unión aduanera y la promesa de que cualquier proposición respecto al Brexit debería ser apoyada por el público en un nuevo referendo con la permanencia en la unión europea como una de las opciones en la boleta. La idea de un Brexit sin acuerdo fue rechazada de forma abrumadora en la votación del miércoles, pero considerando la ausencia de otro acuerdo del agrado de los líderes europeos o una revocación del artículo 50, esta sigue siendo la posición estándar.
Hoy fue el día en el que gran bretaña debía dejar la unión europea. En estos momentos, la fecha límite es el 12 de mayo del 2019. Hay una sugerencia en el parlamento que reza que fallar en elegir una forma de ir hacia adelante podría incentivar otra extensión, probablemente hasta marzo del 2020, lo que obligaría al reino unido a celebrar elecciones para el parlamento europeo esta primavera.