La libra esterlina ha protagonizado una pequeña subida frente a las demás divisas principales. No hay ninguna razón fundamental para ello más que el creciente discurso político (de la oposición) de encontrar formas de evitar un "no deal" Brexit.
Todos los principales mercados bursátiles volvieron a cerrar a la baja debido a la creciente preocupación por la desaceleración de la economía mundial.
En Europa, a lo largo de la semana, el FTSE bajó un 1,9% con respecto al cierre de la semana pasada, situándose en 7117,2; el Dax terminó en 11563, un 1,1% por debajo del cierre de la semana pasada; el CAC bajó un 0,51% para terminar la sesión en 5300,8.
El Dow terminó la semana con una caída del 1,5% y cerró en 25886. El índice compuesto Nasdaq bajó un 0,79% en el transcurso de la semana, situándose en 7896.
El Nikkei 225 finalizó la semana con una caída del 1,9% y finalizó la sesión en 20685.
En el mercado de divisas, la semana pasada, la libra disfrutó de lo mejor de la operación. La divisa americana cayó contra la libra esterlina durante la semana pasada y cerró en $1.2154 contra la libra esterlina, perdiendo 0.63% durante la semana. Durante la semana pasada el dólar logró avanzar contra el euro, y cerró en $1.1090 contra el euro.
Contra el yen japonés, el dólar avanzó y cerró en 106.4 contra el dólar, alcanzando una ganancia de 0.88%.
El euro cayó contra el yen y cerró en 118, lo que representa una pérdida de 0.27% en el transcurso de la semana. La semana pasada fue más débil frente a la libra esterlina, y el cierre fue de una libra esterlina que compró 1,0959 euros, lo que supone una pérdida del 1,8% durante la semana. El euro sufrió a causa de los temores de una recesión en Alemania.
El euro ahora compra 1.0870 CHF, una pérdida de 0.25% durante la semana.
En el mercado de materias primas, el precio del crudo Brent por barril alcanzó los $58.64, un alza de 0.19% durante el transcurso de la semana. El valor del oro subió la semana pasada y cerró en $1512.5 por onza, un alza de 2.2% durante la semana.