Italia se enfrenta a una nueva crisis política tras la dimisión de su Primer Ministro, Giuseppe Conte. Actualmente, Italia está gobernada por una coalición entre el Movimiento 5 Estrellas, que se opone al establecimiento, y el populista de derecha La Ligue (antigua Liga del Norte). El Sr. Conte actúa como primer ministro independiente, ya que ninguno de los dos se alegró de que el otro partido proporcionara un primer ministro para la coalición que llegó al poder hace 14 meses. El Gobierno ha estado en conflicto con la CE por su presupuesto previsto, lo que habría violado las normas de convergencia del euro de la UE, pero, al final, se encontró un frágil compromiso.
La crisis actual llegó a su punto álgido cuando el Sr. Salvini, líder de La Ligue, declaró que ya no podía trabajar con el Movimiento de 5 Estrellas y presentó una moción de censura contra el Sr. Conte.
El Sr. Conte dimitió tras condenar enérgicamente a Salvini en el Parlamento, acusándole de "buscar un pretexto para volver a las urnas" y de la práctica "desmesurada" de "combinar eslóganes políticos y símbolos religiosos en los mítines". En su declaración ante el Senado, Conte señaló: "Es irresponsable iniciar una crisis gubernamental. Muestra intereses personales y partidarios. Aprovecho esta oportunidad para anunciar que presentaré mi renuncia como jefe de gobierno al presidente de la república".
El Presidente italiano ha aceptado la dimisión del Sr. Conte, pero le ha pedido que siga siendo Primer Ministro mientras continúan las conversaciones sobre la formación de un gobierno de coalición diferente. Si estos fracasan, los italianos irán a las urnas. Durante las últimas elecciones, para el Parlamento Europeo, los candidatos de La Ligue obtuvieron el 34% de los votos contra el 17% del Movimiento de 5 Estrellas, lo que podría estar detrás de las maniobras actuales.
El líder del Movimiento de 5 Estrellas, Luigi Di Maio, respondió a los acontecimientos en los medios sociales (Facebook): "el día en que la Liga tendrá que responder de sus faltas por haber decidido derribar todo, abriendo una crisis gubernamental a mediados de agosto". El puesto afirmaba que "era un honor" haber trabajado con el Sr. Conte.
La economía italiana es la tercera más grande de la zona euro y la inestabilidad política en Italia debilita el sentimiento hacia el euro, causando que se devalúe marginalmente.