El par de divisas más popular del mundo ha estado en una racha perdedora desde el principio de la semana, ya que el Euro ha retrocedido un 0,99 por ciento frente al Dólar Americano, después de haber ganado un 4,12 por ciento durante la semana anterior.
Me parece que es seguro asumir que los osos están dominando actualmente en este mercado, debido a dos factores importantes. El primero es la perspectiva económica (que está muy influenciada por la propagación de la epidemia de coronavirus) y el segundo es la creciente demanda del Dólar, que está siendo empujado por las expectativas de una recesión económica mundial, debido a que el Dólar tiende a superar a las monedas de mayor riesgo en situaciones como ésta, especialmente las monedas de los países que dependen en gran medida de sus exportaciones.
La zona Euro se está viendo muy afectada por la propagación de la epidemia de coronavirus, tanto en el plano sanitario como en el económico. Italia es ahora oficialmente el país más afectado, con unos 105.792 casos confirmados y 12.428 víctimas mortales, superando el número de muertos de China, seguida de España que tiene actualmente 95.923 casos confirmados y un número de muertos de 8.464. Esas cifras han hecho que muchos individuos y analistas consideren a Europa como el epicentro actual de la pandemia.
Desde el punto de vista económico, la zona Euro tampoco se encuentra en la mejor situación. La Comisión Europea prevé una recesión más profunda que la gran recesión del 2009, lo que la vincula con las interrupciones de la oferta, puesto que están afectando a las cadenas de valor mundiales y a la capacidad de producción de los países. Aún no hemos obtenido datos oficiales y claros sobre el desempeño económico de la Eurozona en el primer trimestre, aunque ya sabemos que la actividad comercial del área puede haber disminuido dramáticamente desde el comienzo del brote, ya que el PMI compuesto preliminar del área bajó a 31.4 en marzo, cayendo drásticamente desde la cifra de febrero.
En lo que va de esta semana, los datos económicos de la Eurozona resultaron ser decepcionantes. El lunes, los mercados se enteraron de que el sentimiento económico de la Eurozona no está en su mejor momento, debido a que el indicador del sentimiento económico cayó dramáticamente tanto en la Eurozona como en la Unión Europea. Lo mismo ocurrió con el indicador del sentimiento empresarial, ya que las expectativas de producción de los directivos se desplomaron, así como con el indicador de las expectativas de empleo. Además, ese día nos enteramos del índice preliminar de precios al consumidor de Alemania, que se situó en un 1,3 por ciento en marzo, frente al 1,7 por ciento de febrero (de un año a otro).
El martes, la Oficina de Estadísticas Alemana dio a conocer la tasa de desempleo de Alemania, que se mantuvo casi estable en marzo en un 5 por ciento. Eurostat también publicó las cifras preliminares de la inflación, que se situaron en el 0,7% y mostraron una fuerte caída desde la cifra del mes anterior, que fue del 1,2%.
En cuanto a la demanda de Dólar, hay que señalar que ha sido más o menos sólida desde el principio de la semana, en comparación con el rendimiento de la semana anterior. El Índice del Dólar, el cual mide el desempeño del Dólar frente a un conjunto de monedas, ha avanzado un 0.69% desde el lunes a pesar de que ayer sufrió un retroceso. Esto es notable dadas las cifras de la semana anterior, ya que el Dólar perdió un 4.41 por ciento contra las otras monedas.
Ahora las expectativas para los traders del Euro pueden empeorar, dado que el Ministro de Economía de Italia, Roberto Gualtier, anunció recientemente que esperan una caída del 6 por ciento en el PIB del país para el año 2020. Lo más probable es que Alemania sufra el mismo destino, pues el consejo de asesores económicos de Alemania considera que ahora es inevitable una recesión, previendo una contracción del 5,4 por ciento del PIB. En cualquier caso, deben prestar mucha atención al rendimiento del Dólar esta semana, así como a los datos de las solicitudes iniciales de desempleo de EE.UU. que se publicarán el jueves. Al final de la semana, IHS Markit publicará el índice PMI compuesto final de la zona Euro, que también es relevante para aquellos que comercian en base a los fundamentos. Por último, el viernes se publicará el informe de nóminas no agrícolas (NFP) en los EE.UU., que aclarará el estado del mercado de trabajo en los EE.UU., el cual se espera que muestre una cantidad preocupante de nuevas solicitudes de desempleo que pueden complicar aún más las cosas.