El ministro anunció el miércoles que el gobierno está dispuesto a reconsiderar su actual propuesta. Sin embargo, recalcó que el plan resultante debe ser sostenible desde el punto de vista del gobierno.
"Estamos dispuestos a considerar cualquier combinación de reducción de intereses, reducción de capital, extensión y vencimiento del periodo de gracia que respete las limitaciones que definen lo que es sostenible", declaró Guzmán en una entrevista con la agencia Bloomberg, "Somos flexibles en términos de combinaciones de parámetros. La esencia es la sostenibilidad" agregó.
De no alcanzar la decisión deseada a la fecha, el gobierno podría realizar el pago requerido y extender las negociaciones hasta el 28 de junio. Esto alivia un poco las tensiones al respecto, sin embargo, la percepción general respecto a la sostenibilidad de la deuda argentina sólo hace pensar que se está prolongando lo inevitable.
La propuesta del gobierno de Alberto Fernández consiste en establecer un período de gracia de tres años, un recorte del 5.4% del capital de una deuda cuyo valor es de 65 billones de dólares y una reducción del 62% en los pagos de intereses. De ser exitosos en sus pretensiones, el gobierno obtendría un alivio de 41.5 billones, lo que equivaldría a bajar los intereses de 7% a 2.33%.
La propuesta resultó inaceptable para los bonistas, aunque el gobierno de Fernández ha logrado atraer la simpatía y el apoyo de más de 130 economistas, entre ellos el premio Nobel de economía Joseph Stiglitz. El gobierno también ha recibido el respaldo de los gremios de trabajadores y empresarios.
En estos momentos, como el resto de los países del mundo, Argentina se encuentra luchando en contra del avance de la pandemia de Covid-19, la cual ha infectado alrededor de 5,371 personas en el país y ha cobrado la vida de 282. El país debería de continuar en cuarentena hasta el 10 de mayo, pero se espera que el gobierno la extienda hasta el domingo 24. También se espera que el gobierno anuncie la "fase de reapertura progresiva", la cual habilitaría parcialmente las actividades industriales y comerciales en la provincia de Buenos Aires.
Respecto al peso argentino, las expectativas no son las mejores para esta divisa. Desde el inicio de la semana, el dólar americano se ha apreciado en un 0.82% frente al peso argentino, cerrando la sesión del jueves en 67.165 por dólar. El banco central recientemente introdujo unas restricciones en el mercado de divisas, pero al parecer el apetito por la divisa estadounidense sigue siendo alto.
A ciencia cierta, no está claro cuál rumbo tomará la situación crediticia de este país. Algunas partes involucradas sugieren que la reestructuración de la deuda externa argentina podría tomar hasta un año, e incluso más. En dicho caso, el país podría solicitar una moratoria de su deuda, para así poder evaluar la sostenibilidad de esta cuando la crisis del coronavirus ya haya pasado.
En todo caso, parece que la actual propuesta no será exitosa, o eso es lo que consideran algunos analistas. Algunos van incluso más lejos y sugieren que si los inversionistas no cambian su actitud, el país no tendrá más remedio que declararse en default.
"Este acuerdo aparentemente ha expirado el viernes, pero ya parece muerto" explicó un analista de Capital Economics.