Hay dos razones principales por las que el Dólar Neozelandés avanzó la semana pasada. Por un lado, el relativo mal desempeño del Dólar estadounidense al final de la semana ayudó a impulsar al Kiwi, por otro lado, las buenas noticias sobre la economía china, así como los datos positivos sobre la pandemia de coronavirus en Nueva Zelanda, contribuyeron a un enfoque más optimista hacia esta moneda.
El Dólar estadounidense tuvo en general, una buena semana, ganando un 0.67 por ciento contra una canasta de monedas. No obstante, el martes interrumpió una racha ganadora de tres días y cayó, principalmente a causa de los rumores sobre que la Reserva Federal había bajado su tasa de referencia de efectivo a cero, y la pérdida de apetito por activos seguros, ya que los agentes del mercado tienen ahora mejores expectativas con respecto al futuro rendimiento de la economía, ya que diferentes países están reabriendo después de un par de meses de poner restricciones a sus poblaciones con el fin de detener el avance de la pandemia Covid-19.
El jueves, los mercados comenzaron a valorar la posibilidad de que la Fed fije su tasa de referencia de efectivo en cero, un movimiento que según algunos analistas no tiene sentido y podría empeorar la situación.
"Las tasas negativas no han ayudado a la economía japonesa, no han ayudado a la economía europea", explicó un analista de JPMorgan Asset Management, "Todo lo que hacen es atascar el sistema bancario, hacer más difícil que todo el mundo pueda operar", agregó, resaltando que si el gobierno quiere estimular la economía necesita entregar dinero en efectivo a los consumidores y las empresas.
Además, la caída de los rendimientos del Tesoro de los EE.UU. a dos años también obstaculizó el avance del Dólar estadounidense, aunque los datos de las nóminas no agrícolas, mejoraron ligeramente de lo esperado, amortiguaron la caída de esta moneda. Las nóminas no agrícolas cayeron en 20,5 millones en abril, mientras que la tasa de desempleo subió al 14,7 por ciento. Los analistas esperaban una caída de 22 millones, por lo que cuando los mercados conocieron la cifra real ya habían puesto precio a sus sombrías expectativas.
Las expectativas sobre la economía también están mejorando, ya que varios gobiernos están anunciando sus planes para reiniciar sus economías, ayudando al apetito por activos de mayor riesgo. El gobierno de Nueva Zelanda ya ha comenzado a levantar progresivamente las restricciones, e incluso está hablando de crear una burbuja de viajes con Australia, que es uno de los países menos afectados por la pandemia, con 1.494 infecciones reportadas y un número de muertes de 21.
En cuanto a China, los mercados se enteraron el jueves que las exportaciones chinas tuvieron un mejor desempeño de lo esperado, lo que sugiere un aumento en la actividad económica de China. El gobierno chino informó que las exportaciones aumentaron en un 3,5 por ciento, una cifra significativamente más alta que la caída del 15,1 por ciento que los analistas preveían. Esto contribuyó más o menos a atenuar las tensiones alimentadas por la reciente escalada del conflicto comercial que este país tiene con los Estados Unidos. Cabe destacar que China es uno de los principales socios comerciales de Nueva Zelanda, por lo que tiene sentido que el Kiwi reaccione positivamente cuando los mercados se enteran de cualquier buena noticia procedente de China.
El Dólar neozelandés ha sido denominado repetidamente como un "indicador de riesgo" en los últimos tiempos, lo que significa que cuando hay un sentimiento de optimismo en los mercados, éste tiende a aumentar. Por el contrario, cuando la aversión al riesgo domina el mercado, los traders tenderán a correr desde esta moneda hacia los activos que perciben como "más seguros".
Tendría sentido ver que esta divisa siga subiendo en el futuro, especialmente desde que el estado de ánimo del mercado ha mejorado en las últimas semanas. Sin embargo, como muchos ya han resaltado, la recuperación económica puede no resultar como esperamos, por lo que no sería prudente descartar el aumento de la aversión al riesgo.