En lo que va de semana, el Dólar Australiano ha perdido un 0.77 por ciento con respecto al Dólar Estadounidense, en contraste con las ganancias del 2.86 por ciento durante la semana anterior.
Uno de los factores que determinan la debilidad del australiano es la tardía fortaleza del Dólar Estadounidense, que ha ganado un 0.53% frente a un grupo de sus principales competidores, recuperándose de la caída del 0,94% de la semana pasada.
Esta semana, los mercados se han enterado de mucha información importante sobre la economía australiana. El lunes, la Universidad de Melbourne emitió la cifra de inflación de TD Securities, que se ha considerado un buen estimador de la inflación. En términos anuales, la cifra se situó en el 1.3 por ciento en agosto, permaneciendo sin cambios con respecto a la cifra de julio. Mes a mes se ubicó en un 0.1 por ciento, después de estar en un 0.9 por ciento durante el mes anterior.
Según los datos publicados por el Banco de la Reserva de Australia, el crédito del sector privado se contrajo un 0.1% en julio (mes a mes) después de contraerse un 0.2% en junio. En términos anuales, el crédito del sector privado subió un 2.4%, después de haber subido un 2.9% con respecto al mes anterior. La Oficina Australiana de Estadística informó de que los beneficios brutos de explotación de la empresa, los cuales se situaron en el 15 por ciento en el segundo trimestre tras haber sido del 1.1 por ciento en el trimestre anterior, excediendo considerablemente las expectativas de los analistas que esperaban que se ubicaran en el 1.2 por ciento.
El Grupo Industrial Australiano publicó el rendimiento AiG del Índice MFG que se situó en 49.3 en agosto, por debajo del 53.5 de julio. El Banco de la Mancomunidad de Australia publicó su PMI manufacturero, el cual señaló una expansión más lenta del sector manufacturero en agosto, en 53.6, después de estar en 53.9 durante el mes anterior.
El martes, la Oficina Australiana de Estadísticas informó que los permisos de construcción subieron en un 6.3 por ciento (año a año), después de contraerse en un 15.8 por ciento en junio. En términos mensuales los permisos de construcción subieron un 12 por ciento, después de contraerse un 4.9 por ciento en junio, considerablemente por encima de las expectativas de los analistas que preveían una caída del 2 por ciento. La Balanza por Cuenta Corriente del segundo trimestre registró un superávit de 17.700 billones, por encima de las expectativas de los analistas que preveían que fuera de 13.000 billones.
El Banco de la Reserva de Australia anunció su decisión de mantener los tipos de interés efectivo sin cambios en un 0.25 por ciento, manteniéndose en línea con las expectativas de los expertos. El banco también anunció su decisión de aumentar el tamaño y la duración de su servicio de financiación a plazo, permitiendo a las instituciones autorizadas de captación de depósitos acceder a financiación adicional a una tasa fija durante tres años. En cuanto a su programa de compra de bonos, el banco anunció que hasta ahora ha adquirido alrededor de 61.000 billones de dólares en títulos del gobierno, y que está dispuesto a impulsar sus compras si es necesario. Las tasas de efectivo se mantendrán bajas hasta que la economía vuelva a la senda del pleno empleo.
El banco espera que la tasa de desempleo sea del 10% a finales de este año, y que disminuya al 7% en 2022. El nivel de inflación se proyecta entre el 1 y el 1.5 por ciento para 2022.
Ayer los mercados se enteraron de que el Producto Interior Bruto del país se contrajo en un 6.3 por ciento en el segundo trimestre (año a año), en contraste con el aumento del 1.4 por ciento durante el trimestre anterior. La economía se contrajo más de lo esperado, ya que los analistas preveían una disminución del 5.3 por ciento. En términos mensuales, el PIB cayó un 7 por ciento en el segundo trimestre, después de haber disminuido un 0.3 por ciento durante el primer trimestre y también por debajo de las expectativas de los analistas, que preveían una caída del 6 %.
El Grupo Industrial Australiano junto con la Asociación de la Industria de la Vivienda publicó el Índice de Rendimiento de la Construcción AiG de agosto, que se ubicó en 37.9 después de haber estado en 42.7 el mes anterior. El PMI compuesto del Banco de la Commonwealth de agosto, publicado por Markit economics, se ubicó en 49.4, lo que indica una contracción en el sector empresarial, aunque a un ritmo más lento, si tenemos en cuenta la cifra del mes anterior. El sector servicios también se contrajo a un ritmo más lento, dado que el PMI de Servicios del Banco del Commonwealth para agosto se situó en 49, después de haber estado en 48.1 durante el mes anterior.
Hoy, los mercados se enteraron de que la balanza comercial publicada también por la Oficina Australiana de Estadística descendió a 4607 millones en julio, después de haber estado en 8149 millones en junio. Las importaciones aumentaron un 7 por ciento en junio, después de haber avanzado un 1 por ciento durante el mes anterior, mientras que las exportaciones se contrajeron un 4 por ciento, después de haber avanzado un 3 por ciento en junio.