En el mercado de divisas, la moneda europea cayó este viernes a 1,4845 dólares tras alcanzar un máximo el jueves de 1,5048 dólares.
Algunos analistas sugieren que la caída del euro es en reacción a especulaciones de que China pronto podría permitir una cierta apreciación del yuan. Teóricamente, la apreciación del yuan podría apuntalar otras monedas de la región y aliviar la presión sobre el euro.
Uno de los riesgos con el dólar bajo este escenario podría ser que los bancos centrales en Asia no podría ser obligado a invertir su exceso de dólares en bonos del Tesoro de los Estados Unidos; lo que aumenta las preocupaciones sobre la capacidad de Estados Unidos para financiar el enorme déficit presupuestario.