El euro ganó un 0,4 por ciento la semana pasada, llegando a 1,2334 dólares y hay sólidos indicios positivos de que la moneda común seguirá ganando a lo largo de los próximos meses. Esta es una buena noticia para muchos inversores ya que el euro ha caído un 9,1 por ciento el año pasado mientras que el dólar, por el contrario, aumentó un 7,6 por ciento durante el mismo período. El repunte de la moneda fue evidente durante la sesión asiática del lunes, ya que el par EUR/USD alcanzó un máximo de 1,2353 dólares. Las bolsas europeas también se mostraron prometedoras al final de la semana pasada, cerrando en máximos de 13 meses el viernes por las renovadas esperanzas de que los líderes europeos tomarán medidas para mejorar los continuos problemas económicos de la región. También contribuyendo a la confianza de los consumidores está la creciente especulación de que el BCE va a considerar el establecimiento de umbrales de rendimiento de los bonos comprados en los países europeos con problemas.
Además de registrar ganancias contra el dólar, el euro también subió un 0,06 por ciento a 0,7864 contra la libra durante la sesión asiática del lunes, aunque operó más bajo contra el yen, llegando a 98,12. El comercio de verano fino y volátil está llegando a su fin y los inversores están esperando por los anuncios de esta semana, que incluyen la publicación de las actas de la reciente reunión de la Reserva Federal el próximo miércoles y el encuentro entre los primeros ministros de Luxemburgo y Grecia para tratar un ajuste fiscal para Grecia. El primer ministro griego Antonis Samaras también se reunirá con el presidente francés Hollande y la canciller alemana Merkel a finales de esta semana.