Dos días antes de una crucial reunión del BCE que se espera que revele cómo el Banco Central Europeo tiene previsto ayudar a sus miembros en dificultades, el euro comenzó a subir. Las ganancias se mantuvieron estables durante la sesión asiática del martes. Los inversores esperan que el BCE anuncie un plan de estímulo económico que ayude a sus miembros a mejorar sus situaciones de cara al futuro. Una posibilidad que se ha insinuado por el presidente del BCE, Mario Draghi, es la compra de bonos a corto plazo que venzan a tres años o menos.
A pesar del fortalecimiento del euro a comienzos de esta semana, el panorama de la región sigue siendo tenue ya que Moody rebajó las perspectivas de la región a negativo desde su calificación de AAA. Las calificaciones negativas reflejan las perspectivas de la agencia de preocupación negativa hacia los países más grandes de Europa, especialmente para los Países Bajos, Alemania, Francia y Reino Unido. Moody dijo que la calificación podría volver a estable si las perspectivas de estos países clave vuelven a estable. Igualmente preocupante es la caída de la producción de Europa en agosto, que extiende la contracción de la región a 13 meses. Alemania fue la más afectada ya que los nuevos pedidos de exportaciones alemanas alcanzaron el nivel más bajo en más de tres años.