La mejora de los datos económicos y las expectativas de que la Reserva Federal no subirá las tasas de interés en un futuro próximo ayudaron a revivir el apetito de riesgo de los inversores y empujaron el dólar más alto frente al yen japonés. La semana pasada, la demanda de refugio seguro había sido notablemente mayor al intensificarse las preocupaciones acerca de la baja en las tasas globales de crecimiento entre las economías más grandes del mundo. Lo que le dio los inversionistas algo de alivio fue la noticia de que la confianza del consumidor ha mejorado en los Estados Unidos, al igual que los datos del sector vivienda. Estos dos indicadores son muy importantes, por lo que se sugiere que la economía estadounidense continúa creciendo.
El índice del dólar se negoció en 85.181 DXY, una ganancia de 0,1%, alejándose del mínimo de la semana pasada de 84.472 DXY. El par de divisas USD/JPY también se cotizó al alza en 107,06 yenes, una ganancia de 0,2% desde el mínimo de 105.195 de la semana pasada. A comienzos del mes de octubre el billete verde se dirigía lentamente por encima del nivel de 110,00 yenes, pero ha vuelto a caer debido al nerviosismo de los inversores.
Suben las Divisas Antípodas
Las divisas relacionadas con los productos básicos, tales como el dólar australiano y el dólar neozelandés también habían estado bajo presión debido a las preocupaciones por el crecimiento, (especialmente en lo que se refiere a China), pero el reciente optimismo ha ayudado a las monedas antípodas a mejorar. El AUD/USD se negoció hoy en 0,8757 dólares, una ganancia de 0,2%, mientras que el NZD/USD se negoció en 0,7937 dólares, un alza del 0,3%.