Las acciones chinas bajaron el último día antes de comenzar el enlace comercial entre las bolsas de Shanghai y Hong Kong. El dólar ganó frente a sus grandes rivales, tocando un máximo de siete años frente al yen debido a que la petrolera estadounidense se dirigió a su racha perdedora más larga semanal desde 1986 y el oro cayó.
El Índice Compuesto de Shanghai cayó un 0,5 por ciento a las 13:14 en Tokio y un indicador de las acciones chinas en Hong Kong cayó un 0,6 por ciento. Las acciones chinas cayeron en medio de las preocupaciones de que los recientes rallies fueron excesivos. El índice compuesto de Shanghai recortó la ganancia de esta semana hasta el 2,3 por ciento, mientras que el índice Hang Seng de empresas de China de Hong Kong recortó su avance desde el 7 de noviembre al 1,8 por ciento.
Las bolsas de las dos ciudades comenzarán a cotizar a través del nuevo enlace, conocido también como el Stock Connect (enlace bursátil) el 17 de noviembre. El nuevo enlace permitirá a un neto de 23.500 millones de yuanes (3800 millones de dólares) al día en compras transfronterizas, con el comercio de las empresas listadas en Shanghai en el Índice de SSE 180 y el índice SSE 380, así como las acciones del Hang Seng Composite LargeCap Index y el Hang Seng Composite MidCap Index de Hong Kong. Las acciones con listados duales también son elegibles.
Sube el Dólar.
El índice Bloomberg Dollar Spot subió un 0,2 por ciento, mientras el dólar se compró hasta ¥116.2, la mayor cantidad desde octubre de 2007. El petróleo West Texas Intermediate y el crudo Brent recortaron sus pérdidas semanales después de cerrar ayer en mínimos de cuatro años. El oro bajó un 0,2 por ciento. Los futuros del índice de acciones de Estados Unidos registraron pocos cambios.
“El dólar estadounidense es ampliamente más fuerte y el dólar-yen, probablemente, está liderando esto”, dijo Sean Callow, estratega cambiario de Westpac Banking Corp. en Sidney. “Lo más probable es que la subida de impuestos sobre las ventas se demore y eso probablemente va a ser bien recibido por la renta variable japonesa, ya que elimina de manera efectiva la perspectiva, de otra forma altamente probable, de un trimestre negativo para el PIB el próximo año”.