Las bolsas de Asia subieron, siguiendo a las bolsas estadounidenses en su subida debido a las ventas minoristas mejores de lo estimado en la mayor economía del mundo. El petróleo extendió su caída en Nueva York por debajo de los 60 dólares el barril.
El índice MSCI Asia Pacífico subió un 0,7 por ciento a las 1:51 pm en Tokio, recortando la mayor caída semanal desde el 17 de octubre debido a que las acciones japonesas subieron antes de las elecciones de este fin de semana. Los futuros del índice Standard & Poors 500 cayeron un 0,2 por ciento, con el indicador estadounidense preparado para cortar una racha de siete semanas consecutivas subiendo. El crudo West Texas Intermediate cayó un 1,1 por ciento a 59,30 dólares.
El colapso del petróleo a un mercado bajista se ha exacerbado debido a que Arabia Saudita, Irak y Kuwait, los tres miembros más grandes de la OPEP, ofrecieron los mayores descuentos a las exportaciones a Asia en al menos seis años. Mientras eso perjudica a los productores y alimenta los temores de deflación para algunos bancos centrales, está dejando más dinero en los bolsillos de los consumidores de Estados Unidos mientras aumenta la contratación y la Reserva Federal piensa en el momento para cualquier subida de tipos de interés. China hoy informará sobre la producción industrial.
“El desplome de los precios del crudo beneficiará a los principales consumidores de petróleo, incluyendo a EE.UU., la India e Indonesia, mientras que perjudica a países como Rusia y los de Oriente Medio”, según dijo Hong Sung Ki, un analista de materias primas de Samsung Futures Inc. en Seúl. “Para Japón y las naciones europeas que están preocupadas por la deflación, la disminución de los precios del petróleo da margen para flexibilizar de forma más agresiva la política monetaria”.
El S&P/ASX 200 de Australia osciló entre ganancias y pérdidas y el índice Kospi de Corea del Sur subió un 0,4 por ciento.
El índice Hang Seng de Hong Kong recortó sus ganancias al 0,1 por ciento y un indicador de las empresas chinas que cotizan en la ciudad subió un 0,5 por ciento, recortando su pérdida semanal al 2,2 por ciento. El índice compuesto de Shanghai apenas cambió.