Antes de la reunión de ministros de Finanzas de la zona euro, Grecia repitió el domingo que confía en llegar a un acuerdo en las negociaciones con sus socios europeos. Llegó a repetir, sin embargo, que no aceptaría las cadenas de la austeridad en ningún pacto de la deuda.
Mientras Bruselas avanza con medidas para apuntalar las finanzas de Grecia y ayuda para mantenerla en la zona euro, el primer ministro, Alexis Tsipras, dijo a la revista Stern de Alemania que Atenas necesita tiempo para implementar sus reformas y superar la mala gestión del pasado.
“Espero unas negociaciones difíciles, sin embargo estoy lleno de confianza”, dijo. “Lo prometo: Grecia, dentro de seis meses, será un país completamente diferente”.
El Eurogrupo de ministros de Finanzas se reúne en Bruselas el lunes para tratar de encontrar un terreno común con el nuevo gobierno de Tsipras, elegido con la promesa de desechar las restricciones de austeridad de los rescates internacionales de Grecia en temas como la gestión de la deuda, la financiación, la privatización y la reforma laboral.
Si la reunión no produce resultados, existe la preocupación de que Grecia se encamine a una crisis crediticia que la obligaría a salir de la zona euro. El progreso, sin embargo, podría significar nuevas negociaciones, tal vez más tarde en la semana.
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, se negó a discutir la posibilidad de que Grecia abandone la zona euro si un acuerdo con los prestamistas de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional se viniese abajo como consecuencia de las demandas de Grecia para que se le alivie la carga de su deuda. Él simplemente reiteró la posición de la fundación de la zona euro de que la membresía es “irreversible”.