Por: Barbara Zigah
En los últimos 18 meses, el dólar australiano ha estado bajo una presión significativa habiendo llegado en un punto a un mínimo de seis años, debido principalmente a las bajas perspectivas de crecimiento. En los últimos meses, las evidencias de que la economía China –su más importante socio comercial y de exportación- continúa experimentando un crecimiento lento, envió el dólar australiano a niveles notablemente bajos. Sin embargo, en las primeras sesiones de hoy el Aussie fue uno de los más grandes motores del mercado, ganando casi un 1% frente al USD luego de que el informe del trabajo proporcionara cifras sorprendentemente alentadoras, además de revisar al alza de las cifras de febrero. Esto ha dado un nuevo giro a las expectativas de que el Banco de la Reserva de Australia estaría a punto de un nuevo recorte de tipos de interés.
Como se reportó hoy en la sesión de Londres (9:45 GMT), el par AUD/USD se cotizaba en $0.7750, una ganancia del 0.9%; los analistas señalan a la reciente recuperación de los precios del petróleo como un factor que ayuda a levantar al dólar australiano.
Presión sobre el euro
En la Zona Euro, la incertidumbre sobre Grecia está pesando una vez más en la moneda común sumado a la reciente caída en los rendimientos de los bonos del gobierno alemán que también hace sentir su efecto. El EUR/USD se negociaba en 1,0634 dólares, una pérdida de 0,5%, mientras que el par EUR/GBP se negociaba a 0.7181, un descenso del 0,3% para el euro.