Por: Barbara Zigah
Como se sabe, el gobierno de Japón ha estado embarcado en un plan, que abarca tanto la política económica como la fiscal, destinado a elevar el crecimiento económico. Para tal efecto, el Banco de Japón ha hecho numerosos intentos para que el Yen japonés se debilite lo suficientemente como para promover el crecimiento a través del comercio. Sin embargo, el estatus de “refugio seguro” del yen ha impulsado a la moneda al alza a medida que la incertidumbre global se eleva. No obstante, un asesor económico del Primer Ministro Shinzo Abe ha declarado que no hay necesidad de estímulos adicionales en el futuro próximo, y que la meta de inflación del Banco de Japón del 2% se mantiene. Etsuro Honda también sugirió que el Banco de Japón podría comenzar a frenar sus planes de flexibilización cuantitativa, que ha crecido masivamente en los últimos años.
Hoy en la sesión europea en par USD/JPY se cotizó en 123,9775, a unos pips de diferencia del mínimo para la sesión; el par tocó previamente un máximo de 124,1250. El EUR/JPY subió a 136.1120, una ganancia del 0,21%.
El impuesto a las ventas bajo escrutinio
Sin embargo, de acuerdo con el funcionario japonés, el Banco de Japón tendrá que considerar un alza en el impuesto sobre las ventas que podría darse el próximo año. El gobierno japonés elevó el impuesto sobre las ventas en 2014 y se había preocupado por el impacto. De hecho, los planes para aumentar la tasa este año fueron aplazados luego de que Japón entró en recesión. Si se aprueba, el aumento del impuesto de ventas en abril 2016 elevaría la tasa al 10%.