Los mercados asiáticos cotizaban mixtos el jueves debido a la caída de las bolsas de China en su mayor cantidad en un mes y a que el dólar australiano cayó por preocupaciones de que la inversión se está debilitando mientras que el precio petróleo reanudó su caída y el oro avanzó.
El índice MSCI Asia Pacífico dio la vuelta después de dos días de pérdidas, subiendo un 0,1 por ciento a las 7:01 am, hora de Londres, y el índice Topix de Japón puso fin a una caída de dos días, subiendo un 1,8 por ciento después de los informes de que el gobierno puede aumentar el gasto. El rendimiento de los bonos a 40 años de la nación cayó por debajo del 1 por ciento por primera vez.
El índice compuesto de Shanghai cayó un 6,4 por ciento, la mayor cantidad desde el 26 de enero y el índice Hang Seng de Hong Kong retrocedió un 1,5 por ciento.
Los futuros del índice Standard & Poor’s 500 cayeron un 0,4 por ciento después de que el indicador revirtió una caída de hasta el 1,6 por ciento en la última hora de negociaciones del miércoles, poniendo fin a la sesión con una subida de un 0,4. Los futuros de acciones europeas subieron un 1,3 por ciento.
G-20 El Viernes
Las bolsas globales han oscilado entre ganancias y pérdidas la semana pasada ya que los inversores trataron de encontrar una base en las perspectivas de la economía mundial. Y a pesar de que los ministros de Finanzas de Grupo de los 20, que van a reunirse este viernes y sábado en China, el secretario del Tesoro de EE.UU, Jacob Lew, duda que los políticos y los líderes de la industria sean capaces de ofrecer una “respuesta de emergencia” a las turbulencias del mercado.
Según Sam Tuck, estratega de ANZ Bank New Zealand Ltd. de Auckland, “La nueva información que ha sido procesada por los mercados es la cuestión de si los bancos centrales se están acercando al límite de su capacidad para calmar los temores del mercado y mantener las variables financieras estables”.