El año chino del mono ha comenzado hoy, dando inicio a una semana de días festivos en China durante la cual se suspenderá todo el comercio. Estas vacaciones pueden ofrecer un buen respiro para una economía que lucha y cuyas reservas extranjeras registraron pérdidas por tercer mes consecutivo en enero, con el banco central chino librándose de dólares para evitar que el dinero saliese del país.
Las reservas de divisas de China cayeron a 3,23 billones de dólares en el primer mes de 2016, al nivel más bajo desde mayo de 2012. La caída de 99.500 millones de dólares no fue tan grande como la que vimos en diciembre de 2015, cuando el banco central de China aumentó sus esfuerzos para apoyar el yuan y las reservas chinas se redujeron en 342.300 millones en el conjunto de 2015, debido al aumento de la compra de dólares por los ciudadanos chinos a medida que el yuan comenzó a caer en picado. La situación se agravó aún más por las empresas locales que trataron de pagar la deuda externa durante la reciente tormenta de divisas.
De acuerdo con el Banco Popular de China, las reservas de oro del país se elevaron a 63.570 millones de dólares a finales de enero, desde los 60.190 millones de dólares de finales de 2015.
Otras partes de Asia
Aunque la mayoría de los mercados asiáticos cerraron hoy en deferencia con el Año Nuevo chino, los que estaban abiertos en Australia y Japón abrieron el Año del Mono con una nota ligeramente alcista. El par USD/JPY subió un 0,39& a 117,35, poniéndose brevemente por encima del nivel de 120 durante las operaciones del día. Los sectores financiero y bancario en Japón y Australia fueron los más afectados el lunes con los principales bancos terminando fuertemente a la baja a la luz del reciente anuncio de que el Banco de Japón introducirá tasas de interés negativas.