Por: DailyForex
Las acciones chinas cayeron más de un 1% el miércoles por la mañana antes de recuperarse ligeramente después de que Moody's Investor Services rebajó las calificaciones de la deuda de China de A1 a Aa3, sacudiendo un mercado que ya estaba luchando con una regulación más estricta. En el mismo comunicado, la agencia de calificación crediticia también rebajó su panorama para China de estable a negativo.
“La rebaja refleja la expectativa de Moody's de que la fortaleza financiera de China se erosionará un poco en los próximos años, con la deuda de toda la economía aún aumentando a medida que el crecimiento potencial se desacelera”, dijo Moody's en un comunicado.
Es probable que los costes de endeudamiento de China aumenten como resultado de la rebaja, pero el país se mantiene dentro del rango de grado de inversión, por lo que el país no debería tener problemas para pedir prestados los fondos necesarios. El compuesto chino de Shanghai cayó más de un 1% en reacción a las noticias antes de rebotar de nuevo y registrar una pérdida del 0,66%, mientras que el yuan offshore cayó un 0,1%. Los mercados de Hong Kong se tomaron el anuncio con calma y se mantuvieron estables el miércoles, bajando un 0,11%.
Todas las miradas ahora están puestas en la Reserva Federal, que publicará las actas de su última reunión más tarde el miércoles, un anuncio que los traders esperan que arroje un poco de luz si habrá otra subida de tipos de interés en junio, como se espera desde hace algún tiempo. Los traders también están esperando la reunión de la OPEP programada para el jueves y que será liderada por Arabia Saudita. Los precios del crudo estuvieron relativamente estables el miércoles después de caer el martes debido a la noticia de que Estados Unidos está considerando vender la mitad de sus reservas estratégicas. El crudo Brent subió un 0,11% el miércoles por la mañana a 54,21 dólares por barril, mientras que los futuros del crudo estadounidense subieron un 0,1% a 51,52 dólares por barril. Se espera que la reunión de la OPEP aborde la posibilidad de continuar los recortes de producción con la esperanza de controlar aún más los precios a pesar del aumento de la producción de Estados Unidos.