Protestas en los principales países de Sur América han marcado los últimos días en el Continente, resaltando hasta la fecha los fuertes disturbios que se han pronunciado en Chile, Bolivia y ahora se ha sumado Colombia.
Los líderes de los Países Latinoamericanos han hecho un llamado a la comunidad para proceder a las marchas de forma pacífica, pero esto no se ha podido lograr ya que, gran parte de las protestas tienen como fin, cambiar el gobierno o la estructura de este.
En Colombia, el día de ayer, jueves 21 de noviembre, se realizó una marcha sin precedentes en todo el territorio nacional, donde la gente se unió para protestar en contra del mandato del presidente Duque, y las reformas del Gobierno en cuanto a la Pensión, Salud, Educación y salario mínimo para jóvenes.
Estas protestas han desfavorecido la económica del territorio, afectando los productos básicos como el algodón, café, maíz, entre otros. El café en este momento se está cotizando a 115.73 con una caída del 0.52.
En Chile, las ya mas de tres semanas de protestas han hecho tambalear fuertemente las medianas empresas y el sector de empleo, ya que los comerciantes minoritarios han tenido que mantener cerrados sus establecimientos por seguridad, y esto ha incrementado el desempleo en el sector obrero. El Presidente de la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica ha pronunciado que "A la fecha ya se han perdido 70.000 puestos de trabajo, lo que equivale a casi un punto del desempleo. Si el país no vuelve a funcionar con normalidad en los próximos 10 días, me atrevo a decir que aquí están en juego 500.000 puestos de trabajo más".