Los mercados bursátiles asiáticos estuvieron en general en aumento el martes después de que los informes de que las recientes tensiones en Oriente Medio se estaban calmando y la amenaza de represalias iraníes contra Estados Unidos había disminuido.
El lunes, el precio del Oro alcanzó su máximo nivel en casi siete años, ya que los operadores se decidieron por el Oro por temor a una posible guerra entre los Estados Unidos e Irán. No obstante, los futuros del metal precioso bajaron un 0,13 por ciento a las 3:11 p.m. HK/SIN, tras el anuncio de que no era posible que Irán devolviera el ataque. Los futuros del Oro se negociaron a $1,567.20 por onza luego de que el precio del Oro alcanzara un máximo de $1,582.59 por onza el lunes.
El precio del Petróleo, fortalecido a principios de semana por los temores de que las tensiones pudieran interrumpir el suministro de Oriente Medio, fue más bajo el martes después de que las tensiones parecieran disminuir y de que los temores de una interrupción disminuyeran. Los futuros del WTI de EE.UU. bajaron un 0,84 por ciento a última hora de la tarde en Asia, para cotizar a 62,74 dólares por barril. Por su parte, el Petróleo Brent cayó 0.91% para ubicarse en los $68.28 el barril.
Los índices bursátiles asiáticos aprovecharon el tono geopolítico moderadamente positivo para subir en general. El Nikkei 225 de Japón fue el que más subió, con una subida del 1,60 por ciento, mientras que el ASX 200 de Australia ganó un 1,35 por ciento a pesar de los incendios forestales que están devastando el campo y causando estragos en el mismo. Todavía es demasiado pronto para saber cuánto daño económico resultará de los continuos incendios.
La surcoreana Kospi ganó un 0,95 por ciento y el índice Hang Seng de Hong Kong subió un 0,51 por ciento. Los índices de referencia de China también subieron el martes por la tarde. Las ganancias en Asia siguieron a un día positivo en Wall Street, que desafió las expectativas de la CNBC de que continuaran las pérdidas y vio cómo los tres índices de referencia cerraban al alza.
Las negociaciones con China siguen siendo poco claras
Si bien se mantiene el optimismo en cuanto a la concreción del acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, muchos detalles aún no han sido confirmados, lo que preocupa a los analistas e inyecta escepticismo en los mercados. China, por ejemplo, se ha comprometido en aumentar las exportaciones agrícolas de Estados Unidos, incluyendo los productos agrícolas, pero no ha especificado exactamente cuánto aumentará sus compras. Los funcionarios chinos han sido igualmente imprecisos en cuanto a sus compras "considerables" de productos energéticos y manufactureros estadounidenses.
A pesar de estas cuestiones abiertas, se espera que el acuerdo comercial se firme en Washington la semana que viene, y los operadores estarán atentos para ver los términos exactos del acuerdo y si se aplicarán adecuadamente.