Los precios del Petróleo bajaron por quinto día consecutivo, ya que la creciente preocupación por el coronavirus hizo que los comerciantes empezaran a dudar de la demanda mundial. Los futuros del WTI de EE.UU. se hundieron 1,52 por ciento a las 2:18 p.m. HK/SIN, y los futuros del Crudo Brent bajaron 1,38 por ciento. El Brent se cotiza a un 11 por ciento en las últimas cinco sesiones comerciales, mientras que el WTI ha bajado un 10,6 por ciento, el mayor descenso en cinco días desde agosto de 2019. Las reservas de crudo de EE.UU. se incrementaron en 452.000 la semana pasada, hasta 443,3 millones, según indicó la Administración de Información Energética, menos que el incremento de 2 millones de barriles que esperaban los analistas. Las noticias positivas provocaron inicialmente un aumento de los precios del Petróleo, pero la materia prima no pudo mantener el impulso positivo y finalmente se revirtió a la baja.
El miércoles, los precios del Petróleo disminuyeron a sus precios más bajos en más de un año. También el miércoles se detectaron los primeros casos de coronavirus en Brasil, Georgia y Grecia, lo que llevó a los gobiernos mundiales a aumentar sus medidas de restricción de viajes.
Los analistas esperan ahora la próxima reunión de la OPEP y sus aliados, la cual está programada para la próxima semana, y se centrará en si deben reducir aún más la producción para hacer frente a la menor demanda.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) también tiene su reunión de primavera en el calendario, pero según Reuters, los organizadores están deliberando sobre la posibilidad de convertir la reunión en un encuentro virtual para proteger a los participantes de la propagación del coronavirus, o quizás reducir las sesiones. La conferencia está actualmente programada del 17 al 19 de abril en Washington D.C. y se espera que atraiga a unas 10.000 personas, entre ellas funcionarios del gobierno, empresarios y periodistas de todo el mundo. Una decisión que se espera sea tomada en los próximos días.
Aunque el número de diagnósticos en China ha ido descendiendo constantemente, el miércoles, por primera vez, el número de nuevos diagnósticos fuera de China superó al de dentro de las fronteras de China, asustando a los funcionarios de salud y a los traders, y generando preguntas sobre las medidas de contención que se aplican actualmente, así como la necesidad de adoptar medidas más drásticas.