La Oficina Australiana de Estadística informó de que la tasa de desempleo se situó en el 5.6% en marzo, tras ubicarse en el 5.8% en el mes anterior y por debajo de lo esperado, ya que los analistas pronosticaban que se situara en el 5.7%.
La variación del empleo se situó en 70.700, por debajo de los 88.700 del mes anterior y por encima de las expectativas de los analistas encuestados, que preveían que fuera de 35.000. El empleo a tiempo completo bajó en 20.800 tras aumentar en 89.100 el mes anterior, mientras que el empleo a tiempo parcial se situó en 91.500, tras caer en 500 el mes anterior.
La tasa de participación se situó en el 66.3%, por encima del 66.1% del mes anterior y de las expectativas de los analistas, que preveían que se situara en el 66.1%.
El Tesorero Josh Frydenberg comentó que desde febrero se crearon 2.000 puestos de trabajo al día, el doble de lo que esperaba el mercado, y añadió que el 80% de esos empleos fueron para mujeres y cerca de la mitad para jóvenes. Estos datos dan a los australianos otra razón para mirar al futuro con esperanza y confianza.
El tesorero comentó que la recuperación económica tras el Coronavirus está lejos de haber terminado, aunque va por buen camino.
"A principios de esta semana vimos cifras muy sólidas de confianza de los consumidores y de las empresas, con un aumento de la confianza de los consumidores hasta el nivel más alto de los últimos 11 años.... esto es una prueba de que la recuperación económica de Australia está cobrando impulso", dijo, y añadió que hay muchos sectores, regiones y familias que siguen luchando y que están recibiendo sustento económico del gobierno.
Australia ha tenido mucho éxito en la contención de la propagación del virus. Desde el comienzo de la pandemia, se han registrado 29.457 casos de covid-19 y 910 muertes. A pesar de ello, el gobierno ha sido muy criticado debido a la excepcional lentitud de la distribución de vacunas, sobre todo por el escaso suministro de las mismas.
Dentro de la situación actual de la economía, la ex miembro del consejo del Banco de la Reserva, Heather Ridout, comentó que pasará algún tiempo hasta que las cadenas de suministro vuelvan a ser lo que eran antes. También mencionó que habrá una nueva normalidad y que el cuidado de las pandemias será parte de esta nueva normalidad.
También comentó que, irónicamente, la recuperación económica de China está ayudando a Australia a recuperarse de la pandemia. Esto está ocurriendo a pesar de los problemas diplomáticos que atraviesan ambos países.
En cuanto a la distribución de vacunas, comentó que es necesario impulsarla para poder abrir las fronteras, ya que, de lo contrario, habría que cerrar las de Australia durante un par de años más.
"Tenemos que abrir las fronteras, la gente tiene que vacunarse, tiene que tener la confianza de subir a los aviones. La gente que está vacunada debería poder venir aquí", comentó.