El EURUSD semanal sigue corrigiendo tras alcanzar los 1,315 después de haber rebotado en los 1,203.
Destacamos que, a largo plazo, sigue inmerso en tendencia bajista desde 2011, con claros mínimos y máximos decrecientes.
En el medio plazo, los mínimos de verano podrían haber devenido un soporte clave. Además, las medias rápidas del Ichimoku han cruzado al alza, lo que reforzaría esa idea. Sin embargo, la cotización ha sido incapaz de entrar en el kumo (nube), lo que no es nada halagüeño en absoluto.
Finalmente, en el corto plazo, vemos como el par cotiza dentro de un rango lateral, tomando forma de bandera. Veremos hacia donde acaba rompiendo y que sendero toma.