Por otro lado, la libra esterlina y el yen japonés alcanzaron los 131.77, y se ubicaron en los 132.31 en el momento de la publicación de este informe. Completando el ritmo de descenso a los 130,00 psicológicos de apoyo se consolidará la fuerza a la baja y el apoyo a la venta en el par, que se enfrenta a una intensa presión debido a la falta de una visión clara para el futuro de Brexit, que es el más cercano a estar sin un acuerdo. El par ha registrado una caída de 1.07% durante la última semana. En el gráfico de 4 horas y horario, el estocástico lento muestra señales alcistas y en el gráfico diario el RSI apoya un movimiento alcista. Existe una gran posibilidad de que el par continúe cayendo hasta el nivel de soporte de 131,25, ya que el soporte comienza en el nivel de retroceso del 50% del rally anterior. Al mismo tiempo, un quiebre por debajo de 131,00 confirmaría el movimiento de la línea de tendencia a 127,50 de soporte.
Dado que el yen es una divisa segura, significa que sube cuando el sentimiento es negativo y baja cuando es positivo. Las continuas preocupaciones comerciales mundiales derivadas de la tensa relación entre EE.UU. y China apoyarán la fortaleza del yen. Brexit y la desaceleración económica en la Eurozona se suman a la lista de preocupaciones que apoyan el apetito de los inversores por el yen.
En el plano económico, el Tankan Manufacturing Survey reveló que el crecimiento del sector se encuentra en su nivel más bajo de los últimos seis años, a pesar de las altas expectativas realizadas por el sector manufacturero en el tercer trimestre, sin embargo, los datos no afectaron al yen en el momento de su publicación. Los economistas creen que el sentimiento entre los grandes fabricantes japoneses está cayendo a su nivel más bajo en más de seis años. Japón se ve afectado por la desaceleración del crecimiento económico mundial y los efectos negativos de la guerra comercial entre Estados Unidos y China que afectó a las cadenas de suministro en Asia.
Por el contrario, el PMI manufacturero del Reino Unido aumentó de 47,4 a 48,3 puntos porcentuales. Esto fue mejor de lo esperado, pero no cambia nada físicamente. El sector manufacturero permanece en deflación mientras se encuentre por debajo del nivel 50. Persiste la incertidumbre sobre Brexit.
La senda Brexit seguirá siendo el factor más influyente en la tendencia del par GBP/USD. En el gráfico diario se observa que si el par cae hacia el nivel de soporte de los 130.00, el par continuará en baja y comenzará a cambiar de tendencia. Por otro lado, la resistencia en 135,00 sigue siendo un impulso alcista. La libra podría verse afectada el miércoles por la publicación del Construcción PMI