El S&P 500 va a seguir siendo muy volátil, por no decir más, debido a que las elecciones de EE.UU han sido un completo desastre. Además, incluso si tenemos un claro ganador en las elecciones presidenciales de EE.UU, la realidad es que la composición del Congreso va a ser posiblemente mucho más importante. El Senado sigue siendo republicano, y la Cámara de Representantes en realidad se inclinó un poco más hacia el Partido Republicano. Siendo así, es probable que el mercado vea menos en el camino del estímulo general.
Esto no quiere decir que no recibamos estímulo, pero es más que factible que sea mucho más pequeño de lo que pensábamos inicialmente. Siendo así, el mercado de valores seguramente se recuperará un poco, pero será a corto plazo. La posibilidad de que podamos seguir subiendo o no es una historia completamente diferente, pero señalaré que los internos fueron muy deslucidos, por no decir más. Tenemos la EMA de 50 días sentado debajo, que debería ofrecer una cierta cantidad de soporte, ya que tenemos el nivel de 3400 como algún tipo de fulcro para el precio.
Por el lado positivo, creo que el nivel de 3600 va a ser una resistencia significativa, y en este momento vale la pena señalar que todavía no hemos hecho un "alto más alto", pero ciertamente parece que estamos tratando de hacerlo. En este caso, creo que seguimos viendo mucha acción de ida y vuelta, y una grave falta de direccionalidad a corto plazo. No obstante, si diésemos la vuelta y sufriéramos un breakdown por debajo del nivel de 3200, el mercado estaría por debajo de la EMA de 200 días. Eso, por supuesto, sería un giro muy negativo de los acontecimientos, y es viable que pudiéramos bajar hacia la manija de 3000. Por otro lado, podemos superar el nivel de 3600, y sería conveniente que pudiéramos ir al nivel de 3800, quizá incluso al nivel de 4000. Todo ha sido igual, sin embargo, creo que con lo único que se puede contar es con una gran volatilidad sin sentido, ya que ahora el mercado estará esperando a ver si el estímulo será suficiente para excitar a la gente. Después de todo, los últimos 12 años han sido de liquidez, y han tenido muy poco que ver con las ganancias.