Los mercados del Oro han ido de un lado a otro durante el transcurso de la sesión de trading del martes, ya que los mercados están a la espera de la decisión de la política y la declaración de la Reserva Federal durante la sesión del miércoles. Debido a esto, es posible que el mercado siga viendo un comportamiento ruidoso, ya que estamos esencialmente atascados en el rango general.
Hablando del rango, el nivel de $1790 por debajo es un soporte masivo, y el nivel de $1830 está actuando como resistencia. También vale la pena señalar que la EMA de 50 días y la de 200 días son ambas esencialmente planas, y por lo tanto muestra que el mercado no tiene donde estar. Una vez que tengamos ese anuncio fuera del camino, y por lo tanto es probable que podamos encontrar un poco de dirección. En este punto, el mercado va a seguir buscando direcciones que salgan del Dólar Estadounidense, y por supuesto la idea de las tasas de interés. Con esto dicho, es de esperar que obtengamos un poco de claridad en el futuro y por lo tanto podemos empezar a jugar el mercado en lugar de ver la deriva.
Trabajando por debajo del nivel de $1790 permite la posibilidad de un movimiento a la baja hacia el nivel de $1680, donde habíamos visto previamente la forma del doble fondo. Por otro lado, si logramos un breakout al alza, no sólo podríamos alcanzar la parte superior de esa brecha, sino que quizás incluso iniciaríamos una nueva tendencia ascendente. Considero que en este punto es obvio que el mercado ha estado esperando algún tipo de catalizador, pero también debemos tener en cuenta que estamos en pleno verano, lo que no ayuda a la situación.
Además, el debate entre la inflación y la deflación continúa siendo un factor importante, por lo que parece que al final del día obtendremos una vela significativa e impulsiva que podamos seguir, pero hasta entonces va a ser agitado y a corto plazo. Pienso que en este punto los mercados de Oro también podrían prestar mucha atención a la Plata, que ha mostrado bastante debilidad durante la sesión del martes, por lo que podría arrastrar el Oro hacia abajo junto con él si la correlación vuelve a entrar en juego. En igualdad de condiciones, es una simple cuestión de esperar a que el mercado diga hacia dónde va.
